jueves, marzo 30, 2006

Ítaca

Cuando empieces tu viaje hacia Ítaca,
desea que el camino sea largo,
lleno de aventuras, lleno de experiencias.
A los lestrigones y a los cíclopes,
al tremendo Poseidón no temas,
pues nunca encuentros tales tendrás en tu camino,
si tu pensamiento se mantiene alto, si una exquisita
emoción empapa tu cuerpo y tu alma.
A los lestrigones y a los cíclopes,
al fiero Poseidón no encontrarás,
a no ser que los lleves ya en tu alma,
a no ser que tu alma los ponga en pie ante ti.


Desea que el camino sea largo.
Que sean muchas las mañanas de verano
en que llegues -¡con que placer y alegría!-
a puertos que nunca antes habrás visto.
Detente en los mercados fenicios
para adquirir sus preciadas mercancías,
madreperlas y nácares, ébanos y ámbares,
y voluptuosos perfumes de todas las clases,
todos los voluptuosos perfumes que te sean posibles.
Y visita muchas ciudades de Egipto
y aprende, aprende de los sabios.

Mantén siempre a Ítaca en tu mente.
Llegar allí es tu destino.
Pero no tengas la menor prisa en tu viaje.
Es mejor que dure muchos años
y que viejo al fin arribes a la isla,
enriquecido por todas las experiencias de tu viaje,
sin esperar que Ítaca te de más riquezas.

Ítaca te brindó tan hermoso viaje.
Sin ella no habrías emprendido el camino.
Pero no tiene ya nada que darte.

Aunque la halles pobre, Ítaca no te ha engañado.
Así, tan sabio como te has hecho, con tanta experiencia,
ya habrás comprendido qué significan las Ítacas.


Konstantinos Kavafis

miércoles, marzo 29, 2006

Atenas

...y después de la cena , MyrSiNe, fiel ayuda de cámara de Darío, Rey de los Persas, cumplió con el encargo que él le había dado tres días antes, y justo antes de meterse en la cama le susurró al oído por primera vez: Acuérdate de Atenas. Y entonces Darío se dio cuenta de que esa noche le iba a costar conciliar el sueño.

jueves, marzo 23, 2006

Química

Llegó la estación de la química... Alteraciones psico-somáticas, cócteles de feromonas, estímulos odoríferos. Algo está cambiando y el interior lo está notando desde hace unos días. Todo parecen miradas cómplices que atraen irremediablemente a la trirreme a la deriva hacia el torrente de pasiones. El embate de la tempestad es tremebundo y el frágil esquife va ya enfilado y al galope, espoleado por la ceguera del deseo, hacia el torrente convertido ya en vórtice de pasiones.
De repente, emergen las Rocas Cíneas que se cierran a su paso y el esquife se hunde hecho trizas en aguas del Egeo. Poseidón, dios de los mares sentencia: ¡Ay, atormentado Jasón! ¿No te diste cuenta que te embarcabas en una misión kamikaze? Cambié la química por una fórmula sólo apta para alquimistas para que nunca logres alcanzar la quimera del interés correspondido. Víctima de los designios divinos y preso de la frustración, Jasón invoca a Mendeleiev para darle cuenta de la defunción de su tabla periódica y a Paracelso para que le de lecciones de alquimia avanzada.
Mientras tanto, la rubia e inexpugnable Helena carioca no parece darse cuenta de que todo esto ha ocurrido...y sigue desgranando, cual rapsoda, los principios de la química aplicados a otra historia que, silenciosa pero implacablemente, asesinan en serie las esperanzas de Jasón dándoles sepultura
en la fosas abisales del Egeo. Fuera sigue lloviendo. Llegó la estación de la química, eso dicen... mientras, Jasón sigue esperando a que la primavera llegue también para él.
Agua (Water)

Water, water, everywhere,
And all the boards did shrink;
Water, water, everywhere,
Nor any drop to drink.

Rime of the Ancient Mariner (vv 119-122), Samuel Taylor Coleridge


I’ve been too long lonely and my heart feels pain
Crying out for some soothing rain
I believe I have taken enough
I need a little water of love
Water of love deep in the ground
(but there ain't)No water here to be found
Some day baby when the river runs free
It’ll carry that water of love to me

de Water of love, Dire Straits. Dire Straits (1978)

lunes, marzo 13, 2006

Sangre...Thessaloniki !
Ahora que estoy lejos empiezo a darme cuenta. Tres años juntos no se olvidan fácilmente. Muchas veces me pregunto por qué fuí a Grecia. Mi voz interior me guía hacia la respuesta: Fui para encontrar mis raíces. El milagro se produjo con el descubrimiento de muchos de los que hasta entonces habían sido enigmas para mí. Las raíces se convirtieron en un catalizador que sacaron a la superficie el subconsciente, detalles que habían esperado durante muchos años en las profundidades y de repente se materializaron en conmovedoras revelaciones acerca de mi mismo. Ay madre Grecia, ay grandísima madre Thessaloniki, cuánto tiempo os llevé dentro, en mi sangre, sin saberlo... Me alegro tanto de haber podido reconocer vuestras señales. ¿Estoy a tiempo todavía de pediros perdón, mamá Grecia, mamá Thessaloniki?

viernes, marzo 03, 2006

Αίμα...ΘΕΣΣΑΛΟΝΙΚΗ !

Τώρα που είμαι μακρυά αρχίζω και καταλαβαίνω. Τρία χρόνια μαζί δεν ξεχνιούνται εύκολα. Πολλές φορές σκέφτομαι γιατί πήγα στην Ελλάδα. Η εσωτερική φωνή μέσα μου καθοδηγεί προς την απάντηση: Πήγα για να βρω τις ρίζες. Το θαύμα πραγματοποιήθηκε με ανακαλύψη των αιτίων για πολλά ανηξήγητα μέχρι τότε. Οι ρίζες τελικά αποτέλεσαν σε καταλύτι που έφεραν το υποσυνείδητο στην επιφάνεια, λεπτομέρειες που περίμεναν πολλά χρόνια στο βυθό και ξαφνικά ηλοποιήθηκαν σε συγκλονιστικές αποκαλύψεις του εαυτού μου. Αχ, μάνα Ελλάς, αχ μεγάλη φτωχομάνα Θεσσαλονίκη, πόσο καιρό σας κουβαλούσα μέσα, στο αίμα μου, και δεν το ήξερα... Χάρηκα τόσο πολύ με την αναγνώριση των σημαδιών σας. Προλαβαίνω ακόμα να σας ζητήσω συγνώμη, μαμά Ελλάδα, μαμά Θεσσαλονίκη;





jueves, marzo 02, 2006

Amor (II)

Alfa y omega, principio y fin. No se sabe como empieza ni cuando ni cómo se acaba, llegado el caso. Los ríos de tinta son inútiles, no se puede dar una definición. Quizá esa es la razón principal por la que nos vuelve locos, que es irracional e inexplicable al mismo tiempo, y además pasa porque sí. Creación de teorías, tomas y dacas que no consiguen sacarnos del bucle del eterno retorno. Pero es tan bonito cuando llega de verdad...
Amor (I)

Porque el amor te espera en la esquina
y el dolor te espera en cualquier lado
Yo ya no quiero mi aliento oxidado
sólo para mi.

Andrés Calamaro