lunes, abril 24, 2006

Siesta

Religión profesada mayoritariamente por todos los pueblos mediterráneos, caraterizada por la gran devoción con que la profesan todos sus feligreses pese a la implacable persecución a la que se ven sometidos hoy en día.

Las sagradas escrituras recuerdan la obligatoriedad de asistencia diaria a la liturgia, cuya duración oscila entre los treinta minutos de la iglesia de occidente y las dos horas de la iglesia de oriente.

El dogma proclama que las manifestaciones del maligno son tres: la empresa privada, el horario partido y las horas extraordinarias.

domingo, abril 23, 2006

Caviar

Pequeños y exquisitos granitos negros, con fulares y corbatas grises, vagando por los pasillos en rotaciones periódicas buscando con la ilusión de un niño el parteluz de la sala contígua para escuchar unas palabras de aliento que alivien los padecimientos del Via Crucis de las ocho horas.

Pequeños y exquisitos granitos negros, amantes del arte, condenados a observar reflejos de la realidad de sombras de caverna platónica, sometidos a torturas que el pudoroso Dante no se atrevió a contar en su descripción del infierno.

Pequeños y exquisitos granitos negros, condenados a permanecer permanentemente alerta, condenados a sentarse en potros de tortura cuando necesitan sentarse a descansar, condenados a un absurdo silencio ceremonial y condenados también a atragantarse con su propia comida en testimoniales pausas de treinta minutos.

Pequeños y exquisitos granitos negros, caviar de licenciados en humanidades, untados en tostas delicatessen y servidos en los cócteles de una baronesa que coleccionó cuadros y los vendió al estado como si fuesen acciones de bolsa, reservándose la stock option de oro.

El estado Hobbesiano, reunido en aquelarre, engendró entonces un horrible Leviatán bicéfalo, dirigido por Alfas absolutistas con patente de corso, llamado Museo Estatal de gestión privada, erigiendo así un colosal monumento a la desfachatez del capitalismo salvaje disfrazado de filantropismo y cultura llamado Fundación Thyssen Bornemizsa, construido con los ladrillos del expolio y de los botines de la segunda guerra mundial.


A todos mis compañeros auxiliares de sala.

lunes, abril 10, 2006

Wolfgang

Mañana de domingo laborable. Cuesta sobreponerse al hecho, pero que alivio al descubrir que los tubos de órgano de los escapes y el bajo contínuo de motores de Bach no han madrugado hoy... y qué intensa emoción al comprobar que mi incorregible Mozart ha aprovechado el despiste para subirse a las ramas a dirigir un sublime cuarteto de cuerda.
(Con) tacto

El resorte del fatal puntero va como un torpedo hacia el objetivo.

Contramedidas activadas, dos centímetros de plexiglas impiden que la yema llegue a tocar el preciado óleo. El auxiliar de sala respira aliviado...

viernes, abril 07, 2006

Oscar

Oscar frente a Oscar. Desde la pared, Oscar no pierde detalle de Oscar. Desde la silla, ella, Oscar en clave, ya no presta atención a ese señor que fija su mirada en la pupila azul de la obra de arte viva.

Oscar, pasa, pasea y vuelve a pasar liberando su sugerente fragancia regalando una sonrisa cada vez.

Kokotchka, el Oscar de la pared, le está contando a Ernest el secreto: Ella, la belleza clásica de bucles con destellos rojizos, la “coronada con laureles” que ese es su verdadero nombre, surgió como su prima Afrodita de la espuma pintada de un cuadro del maestro Boticelli que está en el piso de arriba y... ¡sshhh! Que viene el relevo y nos van a oir. Y tú, Ernest Ludwig Kirchner olvídate de que somos expresionistas y haz mutis por el foro. Demasiado tarde, porque me ha dado tiempo a oírlo todo...